Guía completa para el mantenimiento y el cuidado de las superficies de la cocina
El cuidado de las superficies de la cocina es esencial para prolongar la vida útil de nuestro espacio y mantener su aspecto estético y características funcionales con el paso de los años. En Davinia, como especialistas en mobiliario de cocina prémium, queremos ayudarles a conservar su muebles y superficies en perfecto estado. Así, hoy les presentamos una guía completa para el mantenimiento de los muebes en distintos materiales y los revestimientos más comunes en la cocina. Con estos consejos podrán preservar la belleza y funcionalidad de su cocina durante años.
Cómo cuidar muebles de cocina de madera
La madera es uno de los materiales más elegantes y atemporales para el mobiliario de cocina, pero requiere un mantenimiento adecuado para que conserve su apariencia natural y funcionalidad.
Consejos esenciales
Limpieza diaria. La madera es susceptible a las manchas de grasa y humedad. Debemos limpiarla con un paño suave y húmedo (nunca mojado) y un jabón neutro. De forma ocasional también podemos utilizar un producto específico para la limpieza de la madera. Evitaremos productos abrasivos o con alto contenido de alcohol, ya que pueden dañar el acabado.
Evitar la exposición a la humedad. La humedad excesiva puede deformar y deteriorar la madera. Es importante secar rápidamente cualquier derrame y evitar que las superficies queden expuestas al agua por periodos prolongados.
Protección y pulido. Para mantener la madera en buenas condiciones, podemos aplicar un protector especial para madera de cocina cada seis meses. Esto ayudará a preservar el color y protegerá la superficie de los arañazos.
Cómo cuidar las encimeras de la cocina según el tipo de material
Las encimeras pueden estar hechas de materiales muy diversos, y cada uno requiere de unos cuidados específicos.
Encimeras de granito. Estas superficies son muy resistentes, pero, para conservar su brillo, debemos limpiarlas con un paño suave y un limpiador para piedra natural. Es importante sellarlas periódicamente (cada uno o dos años) para evitar manchas de líquidos y grasas.
Encimeras de mármol. Las encimeras de mármol son porosas y pueden mancharse fácilmente. Debemos evitar el uso de productos ácidos y utilizar siempre una base para evitar el contacto directo con elementos calientes. Podemos limpiarlas con un jabón suave y agua tibia, secando bien después.
Encimeras de cuarzo. Este material es muy resistente a las manchas y al calor, pero debemos evitar productos de limpieza con alto contenido de pH. Utilizaremos mejor agua tibia, jabón neutro y un paño suave para su limpieza diaria.
Encimeras laminadas. Son una opción económica y fácil de limpiar. Para ello utilizaremos un paño suave y un limpiador multiuso suave. Evitaremos, además, dejar líquidos estancados para prevenir que el laminado se despegue con el tiempo.
Encimeras de madera. Al igual que con los muebles de madera, conviene evitar la exposición prolongada al agua. Lo más adecuado es limpiarlas con un paño húmedo y aplicar periódicamente un aceite especial para madera que nutra y proteja la superficie.
Cómo limpiar azulejos y juntas en los revestimientos de las cocinas
Los azulejos protegen las paredes de salpicaduras y manchas, y mantenerlos limpios garantiza que podamos disfrutar de una cocina reluciente.
Limpieza regular de azulejos. Podemos usar una mezcla de agua caliente con un jabón neutro o vinagre blanco para eliminar las manchas de grasa que suelen acumularse en las zonas de cocción. Aplicaremos la solución con un paño o esponja y secaremos con otro paño para evitar manchas de agua.
Limpieza profunda de las juntas. Las juntas tienden a acumular suciedad y a oscurecerse. Para limpiarlas, mezclamos bicarbonato de sodio con agua hasta formar una pasta, la aplicamos sobre las juntas y frotamos con un cepillo de dientes. A continuación, enjuagamos con agua y secamos bien.
Protección adicional. Si los azulejos tienen mucha exposición a la grasa, podemos aplicar un sellador de juntas para protegerlas y facilitar la limpieza en el futuro.
Cómo limpiar suelos en función del material
Los suelos de cocina están expuestos a caídas, derrames y pisadas de personas constantes, por lo que necesitan un cuidado adecuado para mantenerse en óptimas condiciones.
Suelos de cerámica o porcelánicos. Estos suelos son resistentes y fáciles de limpiar. Debemos usar una mezcla de agua tibia y jabón neutro, y evitar productos con ácidos fuertes que puedan dañar el acabado. Recordemos secar bien el suelo para evitar resbalones.
Suelos de madera o parquet. Este tipo de suelo requiere un cuidado similar al de los muebles de madera. Utilizaremos una mopa ligeramente húmeda y un limpiador especial para madera. Hay que evitar el agua en exceso para prevenir que se hinche o se dañe.
Suelos de vinilo. Los suelos de vinilo son resistentes y fáciles de mantener. Podemos recurrir a un limpiador multiuso suave y un paño o fregona de microfibra. No utilizaremos productos abrasivos ni ceras, ya que pueden dejar una capa opaca.
Suelos de piedra natural. Como el mármol o la pizarra, estos suelos necesitan un mantenimiento específico. Para limpiarlos debemos utilizar limpiadores formulados para piedra y no usar nunca productos ácidos. Además, es recomendable aplicar un sellador para proteger la superficie y conservar su belleza.
Con estos consejos, podremos mantener las superficies de nuestra cocina como nuevas, prolongando su vida útil y su atractivo estético. Cabe recordar que cada material tiene sus particularidades, y adaptar los productos y técnicas de limpieza a cada uno de ellos hará la diferencia en el resultado.
En Davinia somos especialistas en el diseño e instalación de mobiliario de cocina de alta calidad. Estaremos encantados de atenderles en nuestras exposiciones de cocinas de Madrid (Paseo de la Castellana 98) y Mallorca (Calle Mar Mediterrània, 35, Calvià). >> Pedir cita
